[publicado originalmente el 15-8-2005]
escrito por Dr.Escroto

¡Oh no, otra peli de Robert Rodriguez!
Con las pelis de Robert Rodriguez uno no sabe a que atenerse. Lo mismo se luce con Abierto hasta el amanecer o Desperado como caga una mierda tridimensional con Spy Kids 3D. The Faculty estaba entretenida y El mariachi es un clásico del cine de serie Z. Luego va el tío y mete a Enrique Iglesias en Once upon a time in México, haciendo un truñaco.
Pero con esta película titulada Sin City, Robert Rodriguez se ha ganado el perdón de todos sus pecados cinematográficos. Sí, sí, se le puede hacer la vista gorda hasta lo de Enrique Iglesias. Imaginénse que gran película es Sin city.

¿Sin City? Ni idea, a mi en cuanto me sacan de los Mortadelos…
No he tenido el placer todavía de leer los comics en los que se basa la película por lo que no hablaré aquí de fidelidad de adaptación ni frikadas de esas. Aquí me ciño exclusivamente a lo cinematográfico, la peli en sí, vista por un no conocedor del comic.
Esta claro que el cine digital sustituirá al cine en película. Una película como esta no se podría haber realizado en celuloide convencional.

Bruce Willis es el mejor poniendo cara de estreñido
Visualmente la peli es una gozada. Parece literalmente un comic en movimiento con ese blanco y negro (con algunas pequeñas pinceladas de color en momentos contados, utilizando la técnica que ya usó Spielberg en La lista de Schindler con la niña del traje rojo).
La contínua ultraviolencia es también cómica, en los dos sentidos, parece salida del mundo de los comics y porque es tan sádica que hasta provoca la risa. Incluso se llega a empapar la cámara con gotas de sangre.
Una pareja hasta se salió del cine (jaja, que pringaos) cosa que señala el gran impacto que esta película produce en el espectador. No había visto a nadie irse del cine escandalizados desde que vi a unos padres sacando del cine a su hijo huyendo de South Park la película sorprendid0s del lenguaje de esos en apariencia, inocentes dibujos.
Milipunto por tanto para Sin City por la ultraviolencia.

“¡Ten cuidao conmigo que soy fan de Buñuel!”
La estructura temporal es tarantinesca, es decir, varias historias distintas, con protagonistas y antagonistas en cada una de ellas, se suceden a lo largo del metraje cruzándose en algún momento los personajes de las historias. Estilo Pulp Fiction (arrodillémonos todos).
De hecho, el Dios Tarantino ha rodado un par de escenas de Sin city, en agradecimiento a la banda sonora que Robert Rodriguez le hizo para Kill Bill Vol.2. Según dicen en las entrevistas, se pagaron 1 dolar simbólico por sus respectivos trabajos. Parece que el concepto «amiguete» de Santiago Segura está dando la vuelta al mundo.

A pesar de esa horrible camisa de Tarantino los fans no se amedrentan a la hora de pedirle autográfos.
Mención especial merecen la aparición de un nazi calvo con una esvástica tatuada en la frente que es asesinado atravesándole la idem con una flecha (qué risas oiga) pero luego las estrellas ninja de la china son también svasticas y la china está en el equipo de los «buenos». ¿Qué pretende decirnos Robert Rodriguez sobre el nacionalsocialismo?
El maquillaje es cojonudo. Mickey Rourke y Benicio del Toro son reconocibles practicamente solo por sus ojos de las prótesis faciales que llevan encima. Y el bicho amarillo se sale. Todo en blanco y negro y el tío de amarillo, como para pasar desapercibido.

A partir de ahora toda película comercial debe tener su Gollum particular.
Si la mierda de Constantine parecía un anuncio anti-tabaco esta peli es un anuncio constante del vicio del humo. Todo dios fuma. Se nota que es la ciudad del vicio.

“Nena, no te cabrees, te juro que mañana dejo los porros”
Hablando de vicio, hay que mencionar necesariamente a las hembras que lucen palmito en la peli, con curvas dignas de cómic erótico.

Con estos carteles uno ya no sabe si se entra al cine o a un puticlub
Los efectos especiales por ordenador en esta ocasión están muy bien integrados debido al estilo cómic, incluso cuando hacen digitalmente a los personajes (en el atropello por ejemplo) no como en Blade II, en la saga galáctica o en las de los anillos que se canteaban mucho los pixeles en esas ocasiones.
Robert Rodriguez es guionista, co-director con el propio Frank Miller (el autor de los comics, por lo que Rodríguez tuvo que renunciar a pertenecer al sindicato de directores, ya que en el sindicato no permiten que una película se dirija por dos directores, pero a Rodríguez se la pela todo), operador de cámara, director de efectos especiales, músico, montador y productor. Casi ná. Por poco hasta se barre el plató.

Robert Rodriguez y Frank Miller jugando a los dardos para decidir a quién se la chupa primero Jessica Alba
Este tipo de películas son las que merece la pena pagar para ver en cine. No os la bajéis de internet piratillas, e ir al cine a ver las pelis buenas que solo en una sala a oscuras con pantalla gigante y dolby sourround se disfrutan de verdad. (Las palomitas si las podéis piratear trayéndolas hechas del microondas de casa)
Lo dicho, Robert Rodriguez, después de Sin City se te perdona Spy Kids 3D y lo de Enrique Iglesias, pero que sea la última vez que nos das esos sustos.

Robert ganó a la partida de dardos
CURIOSIDAD:
-Link de imágenes de comparación entre el comic y la película